jueves, 12 de noviembre de 2009

El conformismo de la fe:


A lo largo de la vida de un ser humano, es imposible que no haya escuchado la famosa frase: “que sea lo que Dios quiera” o una igual de célebre como: “Dios sabe por qué hace las cosas”. Pero, ¿Qué significa que estas frases ocupen un importante lugar en el vocabulario de los chilenos, y por qué no, del mundo entero?, o ¿Cuáles son los fundamentos de usar tales afirmaciones para contestar y responder a situaciones o interrogantes de difícil respuesta?
Desde mi punto de vista; y sé que puede llegar a ser una posición bastante subjetiva y anti-conceptualista-cristiana si se le puede decir de alguna forma.
Estas afirmaciones pueden indicar variados pensamientos, e incluso, políticas de vida.
Algunos aludidos dirán: “soy católico y creo en la existencia de un ser superior que dio la vida por nosotros, además de la existencia de un ser creador, el que nos hizo a su imagen y semejanza y que por ende nos coloca pruebas para que nos vallamos desarrollando y forjar nuestra identidad”.
Otros podrán creer, al igual que Calvino en su momento, que la vida esta predeterminada, por lo que: ¿Para qué hacer o no hacer algo, si el fin será el mismo, incluso, puede que sin saber, lo realizado estuviera dentro del marco de la propia vida ya dictada por “el superior”?; Bueno, yo no soy quien para entrar a discutir aquellos pensamientos -bastante debatibles por lo demás, ya que muchos católicos, nos dicen que Dios nos dio la libertad de hacer y deshacer (actitud penada al pagar “las cuentas” de sus actos en tierra); libertad de hacer y deshacer bastante “original”, ya que se enmarcaría dentro de un fin ya determinado y no sujeto a cambios (según algunos)…
Pero en realidad; este comentario no busca, como anteriormente dije, criticar tales ideas, sino que busca plantear una tercera opción que, pienso, no ha sido recogida por las personas, ya que significarían una crítica profunda a su persona… significaría autodenominarse como… un conformista.
Palabra que entre variados significados, se podría extraer el de: Persona Que Se Da Por Satisfecha, donde satisfecha en relación a la palabra conformismo significa conceptualmente: “será po” o “no quedara otra”. Lo anterior, es lo que me hace pensar, y en cierta forma meditar a cerca de: el constante conformismo de las personas, refugiándose en un “ente” que sólo está arriba mirando lo que hacemos y que ve impotentemente cómo lo utilizan para tapar errores y para no sentirse mediocres.
Quien esté en desacuerdo con esta idea de conformismo que planteo, me podría explicar, y lo agradecería, el porqué de (como lo dije anteriormente) utilizar a esta “persona superior” como excusa de: no poder dar más. Como por ejemplo: postular a algún trabajo y no dar una buena entrevista. ¿Es válido decir, que sea lo que Dios quiera?, ¿qué culpa tiene Dios de que aquella persona no se haya preocupado como debía, o que simplemente, no sirva y no junte los requisitos para el puesto?, acaso a parte de crearnos, ¿También DEBE asegurarnos éxito, independiente de si uno trabaja o no por conseguir un objetivo?; Esto me lleva a la conclusión de que Este “recurso divino” es propio de los flojos, incapacitados y faltas de respeto a una persona creadora (en discusión para ciertas personas), para poder decir al final del día… perdí, no me resultó, no pudo ser… porque DIOS así lo quiso; o más patudo aun, porque DIOS sabe lo que hace.
Ya está bueno que cortemos la patudez. Dejemos de ser compadre Moncho (de la serie los Venegas para quien no la conozca), levantémonos y pongámonos a trabajar y estudiar, para que así; ese DIOS, de una vez por todas quiera algo para USTED.